Betametasona Dipropionato

¿Cuáles son los riesgos y advertencias del

Betametasona Dipropionato?

Consulte siempre a su médico antes de usar cualquier medicamento. A continuación se detallan las indicaciones de Betametasona Dipropionato, pero su uso debe ser supervisado por un profesional de la salud.

• Antes de usar este medicamento, informe a su médico si usted es alérgico a la betametasona o a cualquier otro medicamento o sustancia.
• Antes de usar este medicamento, informe a su médico si está embarazada, tiene planes de quedar embarazada o si está amamantando. Si queda embarazada mientras usa este medicamento, informe de inmediato al médico.
• Antes de usar este medicamento, informe a su médico si tiene una infección por hongos.
• Antes de usar este medicamento, informe a su médico si tiene o alguna vez ha tenido enfermedades del hígado, riñón, intestinos, corazón, diabetes, hipotiroidismo, hipertensión, enfermedades mentales, miastenia gravis, osteoporosis, herpes en los ojos, crisis convulsivas, úlceras, glaucoma, cataratas, problemas de circulación o un trastorno al sistema inmune.
• Informe a su médico qué medicamentos con y sin receta médica, vitaminas, suplementos nutricionales y productos naturales está tomando o tiene planificado tomar, especialmente si consume medicamentos para la artritis, analgésicos como aspirina y sus derivados, digoxina, diuréticos, estrógenos y anticonceptivos, fluoxetina, ketoconazol, fluconazol, voriconazol, fenobarbital, fenitoína, rifampicina, teofilina, natalizumab, ciclosporina, tacrolimus, everolimus, sirolimus, aprepitán, fosaprepitán, ciprofloxacina, claritromicina, azitromicina, eritromicina, denosumab, trastuzumab.
• Es posible que su médico deba ajustar las dosis de sus medicamentos para evitar efectos secundarios.
• Hay factores de riesgo que incrementan los efectos sistémicos de la betametasona tópica y para minimizarlos se debe evitar la administración de dosis elevadas, la administración continuada durante largo tiempo, en extensas zonas o la técnica oclusiva. En lactantes el pañal puede actuar como un apósito oclusivo.